Sabemos que el huevo es uno de los alimentos más completos, porque aporta cantidades significativas de numerosos nutrientes esenciales, fáciles de absorber y utilizar, y también otras sustancias bioactivas con efectos positivos para la salud.
Además, la proteína del huevo es la de mayor calidad y de fácil digestión, según la FAO contiene todos los aminoácidos esenciales, que son los que nuestro organismo no es capaz de producir, y en una proporción superior a la que se considera ideal, que es la establecida en la proteína de referencia. Nuestro organismo es capaz de aprovecharla casi por completo si está cocinada con la clara coagulada.
Los españoles somos muy conscientes del valor nutricional del huevo, un alimento que ha estado ligado a nuestra tradición gastronómica y que sigue muy presente en nuestra dieta.
Dicho esto, nos preguntamos, ¿cuáles son los huevos que más consumimos?
En las tiendas vemos principalmente huevos morenos, que son los que proceden de las gallinas marrones. Es difícil encontrar huevos blancos porque muchas personas creen que estos proceden “de granjas comerciales”, mientras que los huevos marrones se asocian a los huevos “de campo” y a una mayor calidad.
Pero, ¿qué hay de cierto en esta creencia, son mejores los huevos marrones o los blancos?
La respuesta es sencilla: ninguno, ambos tienen la misma calidad y aporte nutricional.
Un factor muy relevante también a tener en cuenta son los hábitos de consumo, diferentes en cada país. Mientras que en los países anglosajones el huevo se consume más en el desayuno, en España es protagonista en las cenas y las comidas. Y aunque el huevo está muy arraigado en la cultura gastronómica española, no es un alimento habitual en nuestros desayunos, salvo en vacaciones o festivos, cuando se consume en los buffet de los hoteles, o en los brunch. Esto supone una gran oportunidad de desarrollo, también para asociar el huevo a un consumo en momentos especiales que compartimos en los días de ocio.
Sin embargo, los platos con huevo como ingrediente principal siguen siendo estrellas en los menús en nuestro país: 3 de los 15 platos más consumidos en el primer cuatrimestre de 2023 llevaban huevo. Son, por este orden, la tortilla de patatas, los huevos fritos y la tortilla francesa, con un 3,7%, 2,8% y 2,6%, respectivamente de las ocasiones de consumo en el hogar. En total, un 9,1% de los platos más consumidos en España son a base de huevos.
Otro de los elementos que determina el consumo de los españoles es la progresiva implantación del plato único en comidas y cenas, que simplifica el cocinado y ahorra tiempo. Ya son mayoría las comidas y cenas (estas últimas, sobre todo) en las que solo tomamos un plato, aunque hacemos preparaciones más completas, incorporando más ingredientes. Es el caso del huevo, donde el 88% de su uso en los hogares se hace en otras preparaciones, según los datos del panel de Kantar de consumo del primer cuatrimestre de 2023.
¡Está claro que en España seguimos siendo unos fans de los huevos, en sus múltiples formas!
Además, como pudiste leer en anteriores post, los bares y restaurantes españoles podrán usar huevos frescos en sus cocinas para la elaboración de recetas de consumo inmediato siempre que cumplan unos requisitos de tiempo y temperatura de calentamiento durante su preparación.
Se podrán así consumir huevos fritos, pasados por agua, escalfados o revueltos, y también tortillas poco cuajadas, en establecimientos de hostelería con garantías de seguridad.
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